Subir de peso a muchos nos resulta fácil, de hecho, aun y cuando pensamos que estamos haciendo y comiendo lo mismo pasa que ese pantalón que tanto nos gusta ya no nos entra.
Aquí, es momento de identificar qué estamos haciendo diferente para favorecer el incremento de peso corporal a expensas de grasa principalmente o qué condición orgánica está favoreciendo esto más allá de lo que genética pueda condicionar.
Una vez más, les doy la más cordial bienvenida a este nuevo segmento de nutrición en Clínica BK, les escribe la Nutricionista y Dietista Franyelin Colina Estevez. En esta oportunidad, daré a conocer las 6 razones por las cuales ocurre el incremento de peso corporal.
Lo primero será conocer ciertos términos para familiarizarnos con el tema.
¿Qué es sobrepeso y obesidad?
De acuerdo con la OMS (2018) el sobrepeso y la obesidad se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud.
Pero… ¿cómo sé si estoy en sobrepeso? El indicador más utilizado en personas adultas para diagnosticar esto, es el Indice de Masa Corporal o IMC. El IMC da un valor que se obtiene al relacionar el peso de una persona con su estatura.
¿Qué quiere decir eso? Básicamente, cuando una persona es adulta y deja de crecer ya no se compara con nadie de su edad sino consigo mismo. Así por ejemplo, si yo tengo una estatura de 1.60m debo ver cuál es el rango de peso adecuado para dicha estatura.
Si con mi peso actual el IMC es de 25 Kg/m2 o más entonces estoy en sobrepeso o si es de 30Kg/m2 o más entonces entro en la categoría de obesidad. En resumidas palabras, el peso es muy alto para la estatura que tengo.
Existen personas que mantienen un peso estable durante la mayoría de su vida y otras que tienen un peso que varía tanto como una montaña rusa y no logran identificar por qué sucede esto.
¿Cuáles son las posibles causas del sobrepeso?
Vamos a enumerarlas y explicarlas a ver si logras identificar alguna de ellas de ser tu caso.
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Consumes comidas en horarios muy distantes.
Muchas personas realizan sólo 1 o 2 comidas al día, sin control de raciones ni grupos de alimentos y, se preguntan constantemente por qué mantienen un peso elevado.
Lo que desconocen es que durante el largo ayuno que ocurre entre una comida y otra, el cuerpo comienza a utilizar sus reservas de carbohidratos y grasas para mantener el organismo funcionando en óptimo estado.
Tras un buen ayuno, normalmente la comida que hacen muchas personas tiende a ser copiosa o excesiva. Nuestro cuerpo de manera muy inteligente toma todo lo que hemos comido y clasifica, una parte para la obtención de energía y mantener funciones vitales y la otra, es decir, lo excesivo va a la reserva de grasa.
¿Por qué pasa esto?
Cuando se mantiene este patrón de consumo de alimentos con alta carga calórica en horarios muy distantes, se somete al organismo a pasar muchas horas sin recibir nutrientes, y, esto favorecerá la formación de una reserva de la cual vivirá durante el ayuno.
El problema ocurre cuando la reserva es mayor a lo que se utiliza o quema durante el ayuno. Es decir, si guardamos por ejemplo, 1Kg de grasa cada que comemos pero gastamos en el ayuno tan sólo 200g, siempre quedará un excedente.
Después de saber esto… ¿Seguirás realizando sólo dos grandes comidas al día? Yo creo que no.
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Ingieres grandes cantidades de comida.
La principal causa del sobrepeso y la obesidad es el consumo excesivo de calorías.
Así por ejemplo, si yo consumo dos trozos de torta y mi cuerpo sólo logra quemar uno, el otro trozo se convertirá en grasa corporal e irá a la reserva.
Otro ejemplo que con frecuencia ocurre es el caso de las parejas. Donde muchas veces tienden a servirse la misma cantidad de comida.
Una mujer sana que mide 1.50m de altura y su esposo un hombre sano que mide 1.70m de altura, aunque convivan juntos no deben comer las mismas cantidades de comida.
Si esto ocurriera, y los alimentos son suficientes para él, entonces ella aumentaría de peso, ya que sus necesidades nutricionales son menores.
¡Recuerda que todos somos distintos! Y lo que es bueno para otra persona, no necesariamente lo será para otra.
Basándonos en esto, y considerando que cada quien tiene una estatura, edad, genética, condición de salud y necesidades energéticas distintas, es necesario adaptar lo que comemos a lo que realmente necesitamos de forma individualizada.
¿Cómo sé qué y cuánto es lo que debo darle de comida a mi organismo?
Lo mejor siempre será acudir con un experto en nutrición que es quien puede realizar los cálculos necesarios para obtener un diagnóstico nutricional preciso y recomendar un plan alimenticio personalizado.
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Presentas estrés y/o ansiedad.
A veces pasamos por situaciones que nos ponen un poco tensos y ansiosos, y muchos terminan aumentando el consumo de alimentos como excusa a la ansiedad y el estrés.
Muchos de estos alimentos terminan siendo chucherías, snacks no saludables, dulces de pastelería, bebidas enlatadas o envasadas altamente azucaradas, entre otros..
Estos alimentos aunque puedan parecer muy ricos, son extremadamente altos en azúcares y grasas, y, consumirlos de forma frecuente no sólo favorece el incremento de peso corporal sino también promueve el desarrollo de ciertas enfermedades metabólicas, crónicas y/ o endocrinas.
Ingerir alimentos altos en grasas y azúcares no debe convertirse en un hábito, y sabemos el por qué, pero tampoco debe estar prohibido. El detalle será hacerlo con moderación, cuidando la frecuencia y las cantidades.
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Comes con distractores.
El momento de realizar una comida debe ser sagrado, tú y tu comida, nada más. Disfrutar lo que comes, masticar bien, comer lento y nutrir tu cuerpo con gusto.
Sin embargo, hay personas que realizan la comida frente a distractores como lo es la televisión o el teléfono celular. Si estamos más concentrados en cualquiera de ellos, entonces terminaremos comiendo más de lo que debemos.
¿Por qué comemos más de lo que debemos?, mientras estamos distraídos, la señal de que “estás comiendo” o “estás lleno” llegará tarde a tu cerebro y así terminas ingiriendo más de lo debido.
Esta es una de las causas más frecuentes en la niñez y adolescencia de sobrepeso y obesidad. Aún así, de esto no se salvan las personas adultas.
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Cambios hormonales.
Ciertas condiciones de salud como el hipotiroidismo, la menopausia, el período menstrual, pueden alterar los niveles hormonales y causar ansiedad o un enlentecimiento de las reacciones bioquímicas del metabolismo.
Últimamente, también ha habido un creciente aumento en el número de mujeres que se han colocado dispositivos anticonceptivos de larga duración, experimentando un fuerte incremento del peso corporal.
Muchos de ellos tienen una liberación no controlada de hormonas por lo que generan cambios radicales y ansiedad. En consecuencia, dichas mujeres terminan incrementando el consumo de alimentos y pueden no darse cuenta de esto
Para este tipo de casos lo más aconsejable definitivamente es asistir con un nutricionista o nutriologo que te asesore sobré qué y cuánto comer según tú condición ya que las hormonas comandan nuestro metabolismo.
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Dietas muy restrictivas.
La salud no es un juego y sin embargo hay personas que les parece mejor realizar dietas de internet o dietas realizadas por entrenadores físicos de gimnasio. La mayoría o todas estas dietas solo son fotocopiadas y entregadas a todos por igual.
¡Sí, un horror!, esas dietas en su mayoría tienen una restricción muy marcada de carbohidratos y grasas e inducen el consumo mayoritario de vegetales y proteínas.
Éstas dietas al ser realizadas por entrenadores físicos o por personal NO calificado NO son individualizadas, por lo que distintas personas con diferentes condiciones de salud, estatura y composición corporal comerían lo mismo.
Además, restringen tanto los carbohidratos que podrías entrar en un estado de ansiedad y debilidad, donde ocurre no sólo pérdida de grasa sino de músculo y vitaminas, principalmente vitamina B1 y vitaminas liposolubles.
¿Éstas son las llamadas dietas con efecto rebote?
Sí, estas dietas tienen un efecto rebote al no poder ser mantenidas en el tiempo por las causas anteriormente explicadas, y al salirte de ella te querrás comer el mundo y ¡vaya que lo harás!.
Cuida tu salud y ponla siempre sólo en manos de personal de salud calificado y certificado.
Recordemos que “Somos lo que comemos»
Me despido por ahora, espero que hayamos aprendido un poco más hoy y nos llevemos un correcto conocimiento, nos leemos en una próxima entrega.
Cuida tu salud y ponla sólo en manos expertas. Para solicitar una valoración médica gratuita escribanos al siguiente enlace –Solicitar cita–
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Hola, buenos días. Nos alegra mucho que te guste nuestro contenido, un cordial saludo.
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Ocurre. Lo leí aquí Los fabricantes afirman Una copa con las comidas es habitual en muchos países mediterráneos, donde las cenas suelen ser tranquilas y sociales. Algunos estudios sugieren que, para algunas personas, hasta un vaso al día para las mujeres y dos para los hombres puede ser bueno para el corazón. Hable con su médico para ver si es una buena idea para usted.
¡Buenos días! Gracias. Ocurre. Lo leí aquí rhino gold gel en Espana. Creo que – «Las semillas de chía no son sólo una mascota, son una fiesta en tu boca. Soy una gran fanática de ellas porque están repletas de omega-3, fibra, proteínas y calcio saludables para el corazón», Sarah Koszyk, MA, RD, fundadora de Family. Food. Fiesta. nos cuenta en 26 maneras de perder peso que se pasan por alto. «Las semillas de chía son fácilmente absorbidas por el cuerpo, por lo que son muy nutritivas y saciantes. Todos los días las añado a mi batido del desayuno o las acompaño con yogur o requesón junto con unos arándanos.»